Cómo liderar tu negocio digital: Los 5 precios de construir una gran visión

¿Llevas un tiempo con tu negocio digital y empiezas a sentirte exhausto?

Ya disfrutas de ventas, clientes y alta demanda, ¿pero este éxito todavía no se ha traducido en tiempo libre, riqueza o tranquilidad?

Iniciaste este negocio por pasión, ¿pero las ocupaciones del día a día te alejan cada vez más de los temas que te hacen vibrar?

¿Sientes un gran conflicto interno por mantener tu imagen de éxito, mientras sientes frustración, agobio y estrés por tu negocio?

Has vendido bastante, ¿pero no sabes a dónde se ha ido todo tu dinero?

¿Has crecido tanto que cada día parece una batalla con mil frentes que luchar?

Si has dicho que sí a la mayoría de estas preguntas, me gustaría en este momento poder atravesar la pantalla y darte un abrazo.

Esta era yo hace 3 años atrás en mi negocio y si lo que sientes se parece a cómo yo me sentía, era como un abismo que parecía no tener final.

Cada día estás a un email, a un cliente, o una venta de estallar. Tiene que haber una nueva forma de vivir.

En ese momento me cuestionaba:

¿Esto es “emprender por pasión”?

¿Esto es “emprender para ganar libertad”?

¿Esto es emprender para “vivir bajo mis reglas”?

Mi vida y mi negocio no reflejaban esa libertad.

Las ocupaciones diarias se estaban comiendo mi pasión.

Me empezaba a sentir esclava del camino que había elegido.

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Esta era mi situación:

Tenía una estructura demasiado grande que me costaba mucho dinero todos los meses
Aunque si estaba bien organizada, pasaba la mayor parte del tiempo gestionando a este personal.
Yo estaba sosteniendo a todas esas personas, pero esa estructura no estaba sosteniendo mi tiempo creativo, ni mi tiempo de reflexion ni mi tiempo de descanso.
Yo acomodaba a todos pero tenía que luchar por tiempo para mí.
Esa estructura asumía que yo era una máquina productiva que simplemente iba a continuar generando ventas, generando productos, generando dinero, generando webinars, contratando más gente, creciendo más y más y más. Como un lobo hambriento que no se saciaba jamás.

Esto no era sostenible.

La gente siempre me pregunta por mi peor noche oscura del alma.

Y mirando atrás, la peor noche de mi vida fue esta:

Una niña de 9 meses llorando en brazos.
Un equipo enviando miles de mensajes.
Clientes y alumnos pidiendo atención.
Unas redes sociales explotando en comentarios y solicitudes.
Cancelar mi viaje de vacaciones porque era imposible irme en ese momento.
No poder despegarme de la laptop.
Comiendo cuanta porquería podía encontrar para mantener mi nivel de estrés a flote.
Y pensar ¿Esto era mi sueño?

Quiero decirte algo.

Esto no tiene que ser así para ti.

Hoy me doy tantas gracias por todas las decisiones valientes que tomé porque lo hice a tiempo.

Todos esos cambios (sumamente difíciles) son los que hoy día me permiten liderar una empresa digital con alcance global, por una fracción del esfuerzo físico:

Lidero una empresa de 7 cifras con un equipo pequeño
Este año he tomado más vacaciones y semanas libres que nunca (casi 4 meses)
Tengo completo control de mis picos de energía para usarlos en lo que más importa
Tengo confianza total para decir que no a oportunidades que suenan brillantes, pero me agregan agobio y estrés
Tengo consciencia plena de mis ciclos de descanso y me los disfruto sin culpabilidad
Mantengo más del 70% de utilidad en mi empresa
Tenemos más demanda que nunca por nuestros programas (Programas grupales de $5,000USD y USD$6,000).
He renunciado a la satisfacción inmediata de las redes sociales
Mi nivel de estrés se ha reducido drásticamente
Me siento en paz. Plena. Tranquila.
Siento mucha esperanza e ilusión por el futuro.
He encontrado el balance ideal con mi hija Bianca. Cuando soy mamá, soy mamá. Cuando soy empresaria, soy empresaria. Ambas cosas son importantes para mi realización personal.
Me siento más creativa que nunca con ideas nueva, disruptivas, transformadoras.
He renunciado a ser la salvadora de mis clientes, de mis colaboradores y de mis alumnos. Por el contrario, soy su principal promotora para que se salven a sí mismos.
Tengo claridad total en los números de mi empresa: cuánto vendo, cuánto gano, cuánto me cuesta todo esto. Y lo más importante: como todo esto contribuye a mi libertad total.

Te preguntarás:

¿Cómo pude hacer todos estos cambios profundos y hacer mi visión de riqueza y paz una realidad?

¿Cuáles fueron las modificaciones en mi forma de operar?

¿Cuáles fueron los patrones internos de comportamiento que pude identificar y que me empujaban al extremo?

¿Cuáles fueron las creencias heredadas que me mantenían presa sin convertirme en la verdadera líder que soy?

¿Cómo pude callar el ruido del internet y los miles de expertos para crear un negocio que sea 100% a mi estilo?

¿Cuáles fueron los cambios en mi planificación y organización interna?

¿Cómo pude decidir los proyectos que valen la pena liderar, y cuáles no?

¿Cómo reduje mi equipo de 14 a 3 personas?

¿Cómo logré ser la líder creativa que ama su trabajo, pero no sacrificando su vida personal, salud y bienestar?

Por eso ha nacido Elevated Business, la Consultora y Business School de soluciones conscientes para empresarios digitales en expansión.

Nuestro enfoque es facilitar tu vida y ayudarte a desarrollar el liderazgo mental, emocional, espiritual y empresarial que necesitas como un emprendedor con altas capacidades. Has llegado al tope de lo que puedes hacer por ti mismo y necesitas una nueva visión, tomar decisiones y empezar a disfrutar de todo lo que has creado.

Empecemos por el principio.

¿Qué significa liderar?

Hay mil definiciones allá afuera.

Y todas tienen que ver con liderar a otros, mandar a otros, gestionar a otros.

Pero para mí liderar significa otra cosa.

Liderar es tener la madurez de reconocer el precio de hacer tu visión una realidad. Y decidir si quieres pagarlo o no.

Estos son algunos precios de construir una gran visión:

1. Precio mental:

¿Cuál es mi sistema operativo actual? ¿Ya se ha quedado obsoleto? ¿Cuál nuevo sistema operativo interno necesito para avanzar? ¿Cuáles son mis patrones inconscientes que frenan todo mi progreso?

2. Precio en alcance emocional:

¿Cuánto nivel de incomodidad estoy dispuesto a sentir? ¿Cuáles heridas se disparan con mi negocio? ¿Cuáles limitaciones y traumas me previenen de decidir en grande? ¿Cuál es el alcance máximo de riesgo que estoy dispuesto a asumir? ¿Cuál es el máximo nivel de responsabilidad que estoy dispuesto a asumir?

3. Precio en plan y procesos:

¿Cuál es la estructura ideal de operación de mi negocio? ¿Cuál es nuestro plan en los siguientes 6 y 12 meses? ¿Cuál es mi proyección de ingresos? ¿Cuánto cuesta mantener mi empresa funcionando? ¿Cuáles son mis mejores oportunidades?

4. Precio en tus relaciones con otros:

¿Quienes son las personas que aportan a mi vision? ¿Quienes están en el mismo nivel de ambición, acción y productividad? ¿Quienes amplifican mi negocio? ¿Quienes lo atrasan y obstruyen? ¿Quienes me protegen? ¿Cómo mido la contribución de cada persona?

5. Precio en servicio y contribución:

¿Cuál es el alcance de mi servicio? ¿Qué tanto estoy dispuesto a involucrarme en la situación de mi cliente? ¿Cuántos alumnos estoy dispuesto a liderar al mismo tiempo? ¿Cuántos procesos puedo sostener a la vez? ¿Qué es lo crucial que necesitan las personas escuchar de mí? ¿Cómo yo aporto algo diferente al mundo?

¿Te imaginas como funcionaria tu vida si tuvieras estos 5 “precios” bien claros, analizados, decididos y fluyendo?

Te convertirías en otra persona.

Y esta forma de operar tiene un impacto impresionante en cada área de tu vida.

¿Lo mejor?

Si yo pude salir de ese calabozo y vivir de esta forma, tú puedes hacerlo mucho más rápido que yo.

Será un honor ayudarte a desenredar los miles de frentes de un negocio exitoso y empezar a vivir lo que naciste para vivir: una vida que te haga sentir orgulloso.

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Gracias por leer. ¡Hasta pronto!

Diana